El gobierno reformará el sistema de inmigración para evitar que sigan
llegando al país mujeres embarazadas a dar a luz con el único fin de que sus
hijos obtengan la ciudadanía canadiense y por derecho propio todos los beneficios, lo que ha
denominado turismo de parto. Críticos dicen que no sería justo con los recién
nacidos.
"No queremos fomentar el turismo de parto” dijo el ministro de
Inmigración, Jason Kenney, ante los medios de comunicación cuando anunció que
se revisará el sistema de inmigración para evitar que esto siga pasando.
Para el Gobierno de Stephen Harper lo que se busca es evitar que se siga
explotando los beneficios que se otorgan a todos los canadienses por el ser
ciudadanos, para lo cual se adelantará una reforma al sistema migratorio que
plantea planea hacer más rigurosas las reglas que otorgan la ciudadanía inmediata
a todo el que nace en el país.
Según el Gobierno el problema fue detectado especialmente por
administradores y doctores de varios hospitales de Montreal quienes lanzaron
una alerta sobre lo que estaba pasando con el denominado turismo de parto, porque
según las quejas muchas mujeres llegan embarazadas a Canadá, algunas sin un
estatus legal, van a los centros hospitalarios a que las atiendan, tienen el
bebé y luego se van del país sin pagar un sólo dólar y con un hijo canadiense,
que luego utilizan para poder tramitar sus residencia en el país o aplican por
razones humanitarias para poderse quedar.
“Queremos enviar un mensaje a los extranjeros, que deben expresar un compromiso de seriedad y no explotar la generosidad de Ottawa, ni manipular para su provecho este recurso de ley, comentó el ministro de Inmigración, Jason Kenney. Para el Gobierno la norma busca evitar que personas que están de paso en Canadá decidan tener su hijo en el país para aprovecharse de los beneficios que da el estado.
Este cambio haría parte de las modificaciones generales que están
previstas realizarle a las actas de ciudadanía y naturalización de Canadá. Un
plan que ha sido fuertemente criticado por los partidos en oposición al
Gobierno, pero que también ha sido fuertemente defendido por los conservadores
quienes creen que es la mejor manera de asegurar el desarrollo del país.
El llamado “turismo de parto” ha sido una práctica común por muchos años
en países como Estados Unidos y Canadá. Se refiere a las madres extranjeras no
residentes de Canadá que viajan como turistas solo para dar a luz. De esa
manera sus hijos tendrán ciudadanía canadiense, que les ofrece numerosos
beneficios y que sirve como un camino para que sus padres consigan la
residencia permanente.
Canadá y Estados Unidos son dos de los pocos países desarrollados que
mantienen políticas que otorgan la ciudadanía de manera automática a las
personas que nacen dentro del territorio.
Pero el gobierno de Harper quiere enviar un mensaje claro a los que
buscan distintas maneras de “burlar” a Inmigración Canadá. “Necesitamos enviar
un mensaje claro de que la ciudadanía canadiense no es una especie de llave de
acceso al servicio de bienestar de Canadá por medio de una mentira. Es sobre
tener un continuo compromiso y obligación con el país”, dijo Kenney.
Para las organizaciones defensoras de los inmigrantes, estos cambios en
la norma son muy radicales y podrían generar abusos legales, otro críticos
creen que se generaría un problema legal de índole internacional porque muchos
de los partos se presentan por personas que por diferentes motivos están en el
país y que no estaban buscando abusar del sistema, otro porque los niños que
nazcan en estas condiciones no tendrían una nacionalidad definida.
Para el ministro Kenney los cambios que se están planteando serán
estudiados a fondo y se tendrán en cuenta todas las críticas que se hagan y los
casos especiales que se podrían generar de ser aprobaos los cambios, porque lo
que se busca es mejor el sistema y evitar que se abuse de él.
Datos de un reciente censo de Canadá han demostrado que 1 de cada 5
niños que nacen en el país son de origen extranjero, en gran parte por el alto
nivel de inmigración y por el flujo de turistas. Canadá recibe cada año
alrededor de 250 mil inmigrantes nuevos y son ellos los que registran la mayor
tasa de natalidad.
El costo de dar a luz en países como Japón, Inglaterra, o Estados
Unidos, es muy alto frente a lo que se paga en Canadá, por eso algunas madres
giran la mirada a este país para dar a luz un niño, especialmente mujeres con 3
meses de embarazo.
Otra de las razones de peso para tener un hijo en Canadá es que los
padres podrían emigrar al país cuando el niño cumpla los dos años o más de edad
o sea mayor de edad.
U-CAN - Marzo 6, 2012